El 11 de febrero de 1979, tras una de las más populares rebeliones del mundo contemporáneo, triunfó la Revolución Islámica de Irán, cuyo sistema propició que nuestro pueblo y gobierno tomaron las riendas de su destino (y) al practicar una política independiente (…) han trazado su propio camino, señaló el diplomático.
En los últimos ocho años, el gobierno de Irán ha realizado grandes esfuerzos en favor de la desescalada de tensiones y el desarrollo de las relaciones exteriores con otros países para dar continuidad a su política exterior independiente y pacífica, agregó.
Asimismo, aludió al importante papel de Irán en la ayuda a países de la región para establecer la paz y la seguridad, y en respuesta a la invitación de Siria e Iraq, brindó una ayuda efectiva en la lucha contra grupos terroristas y la erradicación regional de entes como el Estado Islámico.
Por otra parte, recordó la firma por Irán del Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC) con los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania, y subrayó que su país respetó los compromisos contraídos en el marco de ese pacto.
La salida de Donald Trump del acuerdo y la falta de voluntad de países firmantes del PIAC para cumplir sus compromisos, ocasionaron que Irán, en reciprocidad y acorde con el Artículo 36 de ese tratado, detuviera el cumplimiento de algunas de sus obligaciones, especificó Eslami.
Caracterizó las relaciones entre su país y Cuba, establecidos tras el triunfo de la Revolución Islámica, como muy sólidas y significó que en los últimos 42 años los lazos bilaterales ganaron en desarrollo.
Puntualizó que los nexos políticos y la cooperación entre ambos países en los organismos internacionales son estratégicas y están en un excelente nivel.
Reveló que se han celebrado 17 sesiones de la Comisión Intergubernamental para la Colaboración Económica y Científico-Técnica bilateral, con importantes acuerdos en la biotecnología, los medicamentos, la salud, la agricultura, el deporte y la producción de vacunas.
agp/msl