«Si es posible, programaremos una temporada tardía al aire libre, de agosto a octubre», dijo Coe en un comunicado.
Al igual que todos los deportes alrededor del mundo, el atletismo sufre de un parón debido a la epidemia y no existen indicios de cuándo podrá reanudarse la competición.
«Sabemos que los países se encuentran en diferentes etapas de gestión de esta pandemia, por lo que estamos tratando de dar una estructura a nuestros atletas y federaciones miembro para que puedan comenzar a planificar para el próximo año», subrayó el directivo.
Ante la posposición de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 para el 2021, el Campeonato Mundial de atletismo, que iba a celebrarse en Oregón, Estados Unidos, en el 2021 fue aplazado para el 2022 con el objetivo de evitar un choque entre los dos eventos.
Además, la justa universal bajo techo, que iba a tener lugar en Nanjing, China en marzo, quedó postergada un año, mientras que los maratones de Londres, París y Barcelona también fueron suspendidos.
La Liga de Diamante pospuso sus primeros cinco encuentros de la temporada 2020, que iban a celebrarse en abril y mayo en Qatar, China, Estocolmo, Nápoles y Rabat.
También el organismo rector del atletismo mundial fijó como una «ventana protegida» para los certámenes nacionales el 8 y 9 de agosto de 2020 después de la interrupción del calendario internacional de competiciones debido a la Covid-19.
«El propósito de crear una ventana protegida es permitir que los atletas puedan competir en sus campeonatos nacionales sin conflictos de programación. Se alienta a las federaciones miembro a aprovechar esta oportunidad si es seguro para los atletas competir en agosto. Esto se aplica principalmente al hemisferio norte, que se encuentra en su temporada al aire libre», explicó la entidad.
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