Expertos indicaron que un temporal debe golpear el norte y el centro de la demarcación mañana, pero esperan que la lluvia y las nevadas resulten poco significativas.
En general, las precipitaciones tienden a disminuir, en tanto expiraron las alertas de inundación que cubrieron a millones en la costa central, indicó el Servicio Meteorológico Nacional.
Ahora, el sistema de tormentas avanza tierra adentro y en esta jornada debe llegar a la región de las Cuatro Esquinas (un área que une los estados de Colorado, Utah, Arizona y Nuevo México), con riesgo de nevadas particularmente fuertes en las zonas más altas.
Entre el 26 de diciembre y el 9 de enero, determinadas zonas de California vieron hasta seis veces más lluvias de lo habitual, que paralizaron el tráfico, inundaron vecindarios y forzaron la evacuación de decenas de miles en todo el estado.
De acuerdo con un reporte del canal CNN, es mayor el número de personas que murieron en las recientes tormentas que el de vidas perdidas en incendios forestales en los últimos dos años.
Entre los 20 decesos relacionados con el temporal hay un niño que falleció cuando un árbol cayó sobre una casa.
Los rescatistas continúan en la búsqueda de Kyle Doan, de cinco años, quien fue arrancado de las manos de su madre por las aguas el 9 de enero.
Ha sido un “momento muy difícil en el estado de California”, afirmó la vicegobernadora Eleni Kounalakis a la televisora.
“Pasamos de cuatro años con muy poca lluvia a, de repente, en un período de tres semanas, nueve ríos atmosféricos se comprimieron en un período de tiempo tan corto”, agregó.
Desde el 30 de diciembre hubo reportes de más de 500 deslizamientos de tierra en California, acotó el Servicio Geológico.
El presidente estadounidense, Joe Biden, declaró el sábado pasado la categoría de desastre mayor para esa demarcación, lo que pondrá fondos federales a disposición de los residentes y propietarios de negocios en varios condados del territorio.
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