Del total de área sembrada, unas 563 mil hectáreas son de regadío y 649 mil de secano, con una tasa de ejecución del 89 por ciento del plan previsto, dijo el directivo.
Añadió que la zona total cultivada con cebada alcanzó hasta el momento un millón 161 mil hectáreas, lo que contribuiría a mejorar la producción y garantizar más forraje al sector ganadero.
También se sembraron 19 mil hectáreas de plantas medicinales y aromáticas, particularmente comino, anís, cilantro, hinojo, tomillo, fenogreco, menta, rosa damascena, entre otros.
El gobierno sirio había aprobado un paquete de medidas encaminadas a impulsar la siembra de trigo y apoyar a los agricultores de este cereal, considerado el principal alimento de la población.
Antes de la guerra en 2011, esta nación producía cantidades suficientes para su consumo y la exportación, pero la producción se redujo de cinco millones de toneladas a poco más de un millón debido a la salida de casi de un millón de hectáreas del plan por estar en zonas fuera del control gubernamental.
El Estado se ve obligado en la actualidad a importar de otras naciones, en particular Rusia, en medio de muchas dificultades resultantes del bloqueo económico y las sanciones por parte de Estados Unidos y sus aliados de Occidente.
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