Según manifestó el funcionario al rotativo Vzgliad, varios comandantes de unidades reportaron el uso de este tipo de armamento en diferentes partes del frente, sobre todo en los asentamientos de Soledar y Artiomovsk.
Gaguin refirió que algunos uniformados experimentaron nauseas, vómitos y fuertes mareos, y agregó que esta no es la primera vez que se registra el empleo de armas químicas por parte del ejército ucraniano.
Semanas atrás se constató que las tropas del régimen de Kiev rociaron sustancias desde contenedores especiales desde cuadricópteros industriales que provocaron náuseas, asfixia y tos, aclaró.
Además, Gaguin subrayó que el uso de armas prohibidas por la Convención de Ginebra por parte de Ucrania debe documentarse y presentarse a la Organización de las Naciones Unidas.
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