Esta postura del mandatario fue expresada durante su recibimiento en esta capital al director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien visitó las zonas afectadas por los devastadores sismos que asolaron cuatro provincias. Según afirmó el Gobernante, la visita de la delegación en estas circunstancias es de suma importancia para conocer de cerca la situación sanitaria y las necesidades humanitarias para tratar a los afectados.
Siria espera una mayor cooperación efectiva con la Organización basada en una visión integral que evalúe la realidad del sector de salud e indemnice la escasez de insumos, equipos y medicamentos y satisfaga las necesidades en casos de emergencia y socorro como terremotos o epidemias, dijo el mandatario.
Agregó que la cooperación debe también ayudar a la respuesta a las necesidades sanitarias de la gente frente a enfermedades graves y crónicas como el cáncer y la diabetes.
Por su parte, Ghebreyesus dijo que su visita y de la delegación que lo acompañó a la ciudad de Alepo fue una oportunidad para identificar los suministros médicos y humanitarios necesarios para atender a los heridos.
El Gobierno sirio había declarado las provincias de Alepo, Latakia, Idlib y Hama como zonas de catástrofe, mientras el jefe del Comité de Socorro, Hussein Makhlouf, reveló que 294 mil personas quedaron sin hogar.
Al menos cinco mil sirios perdieron la vida y otros siete mil resultaron lesionados por los sismos que sacudieron varias regiones de Türkiye y Siria el lunes último, según confirmaron entidades de salud y activistas.
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