Ese indicador cerró en mil 507 puntos esta semana y ubica a esta nación andina en el tercer país de América Latina con el valor más alto.
Según advierten expertos citados en la prensa local, con esa cifra los inversionistas perciben un mayor riesgo para colocar su capital en negocios ecuatorianos.
La incertidumbre se profundizó tras la derrota del Gobierno en el referendo y con las acusaciones de presunta corrupción en las empresas estatales y vínculos del Ejecutivo con el narcotráfico, específicamente con la mafia albanesa. En ese escenario de inestabilidad, los precios de los bonos soberanos de Ecuador cayeron 10 puntos y eso refleja claramente la preocupación por la gobernabilidad bajo la administración del presidente Guillermo Lasso, señaló el portal Primicias.
El gobierno culpa a la Asamblea Nacional (parlamento) por causar esa incertidumbre debido a los debates sobre un posible juicio político contra el mandatario, mientras los sectores progresistas apuntan al Ejecutivo por impulsar una estrategia de abandono social que provoca problemas de inseguridad, desempleo, entre otros.
La ciudadanía castigó a Lasso y a la derecha al votar No a las ocho preguntas del referendo constitucional y al elegir autoridades regionales mayormente progresistas.
A la crisis política resultante del proceso electoral se suman las denuncias por presunta corrupción y nexos del Gobierno con el crimen organizado, según un informe policial archivado y que el medio digital La Posta sacó a la luz esta semana.
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