Según el comunicado del ente castrense, para implementar la farsa, se entregaron varios envases con sustancias radiactivas desde el territorio de uno de los Estados europeos, sin pasar por la inspección aduanera, destacó este domingo la agencia de noticias Sputnik.
La información precisa que, antes del inicio de la 11 sesión especial extraordinaria de la Asamblea General de la ONU el 22 de febrero, Kiev continúa preparando una provocación a gran escala para acusar a Rusia de presuntas «violaciones graves» de la seguridad nuclear.
El Ministerio de Defensa añadió que el propósito es acusar a las Fuerzas Armadas rusas de supuestamente realizar ataques contra objetos peligrosos por radiación en Ucrania, lo que produzca la fuga de sustancias radiactivas y la contaminación del área.
El 14 de febrero, Rusia denunció preparativos de Kiev para una provocación para acusar a Rusia de violar la Convención sobre Seguridad Nuclear en la zona de la central de Chernóbil.
Después del inicio de la operación militar especial de Rusia en Ucrania, en febrero pasado, las fuerzas rusas tomaron bajo su control dos de las cinco centrales nucleares situadas en el territorio de Ucrania: la de Chernóbil (desactivada), y la de Zaporozhie (en servicio), que hoy es la mayor de Europa.
Posteriormente las unidades rusas abandonaron la región de Chernóbil, pero mantienen el control y cuidado de la central de Zaporozhie.
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