El líder ruso calificó de «un teatro de absurdo» los llamamientos de la Organización del Tratado del Atlántico Norte a que Rusia «cumpla con el Tratado START» y permita que expertos occidentales inspeccionen las instalaciones militares y nucleares en la actual situación de confrontación.
El Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (START) de 1991 entre Moscú y Washington se firmó en una situación diferente, cuando las partes declararon que no se consideraban adversarios, pero «todo eso es pasado», dijo.
Posteriormente, nuestras relaciones alcanzaron un nivel en el que Rusia y Estados Unidos declararon que ya no se consideraban enemigos. Fue muy bueno, recordó Putin.
El tratado en vigor en 2010 contiene disposiciones cruciales sobre la indivisibilidad de la seguridad, el vínculo directo entre las armas estratégicas ofensivas y defensivas, pero todo eso se ha olvidado, puntualizo.
Estados Unidos se retiró del Tratado sobre Misiles Antibalísticos, y nuestras relaciones, lo que es muy importante, se han degradado, declaró el presidente ruso.
El Ministerio de Defensa y la Corporación Estatal de Energía Atómica de Rusia (Rosatom) se deben preparar por si necesitan realizar pruebas nucleares, pero Moscú no será la primera en llevarlas a cabo, declaró este martes en su mensaje a la Asamblea Federal.
Por supuesto no seremos los pioneros en realizar los ensayos, pero si Estados Unidos los llevan a cabo, nosotros también, recalcó Putin en su intervención.
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