Según la información, la discusión sobre el presente y el futuro de esa región atrae cada vez más la atención, por lo que representantes de Gobiernos y empresas, científicos y profesionales de diversos perfiles en el foro ofrecieron nuevas soluciones a los problemas de la zona ártica.
“Me parece que un elemento importante fue la adopción de una ley sobre el apoyo a la actividad empresarial en la zona del Ártico, en base a la cual se brindan preferencias fiscales y de otro tipo a las empresas, destacó el primer viceministro ruso para el Lejano Oriente y el Ártico, Gadzhimagomed Huseynov.
Hoy, más de 600 entidades implementan estas preferencias en el Ártico, y el volumen de inversiones asciende a cientos de miles de millones de rublos, y en el futuro esa cifra crecerá a un billón y medio, precisó Huseynov.
Junto con el desarrollo económico, el foco de atención de los participantes de la conferencia también está en los temas del bienestar climático del Norte. Como parte del programa de la presidencia rusa del Consejo Ártico, el país propuso una serie de proyectos de vanguardia.
El desarrollo sostenible de la región del Ártico es un proceso complejo, aseguran los participantes del encuentro, y para avanzar en la dirección correcta, se debe observar un equilibrio ideal: apoyar el desarrollo socioeconómico, pero también no olvidar el desarrollo científico y ambiental.
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