En una reunión sostenida en la sede de la Cancillería en esta capital, el ministro Al-Mekdad elogió la colaboración existente con Acnur y otros organismos y oficinas de la ONU que operan en Siria para ayudar en la superación de las secuelas de los terremotos que sacudieron el país el día seis de febrero pasado.
El jefe de la diplomacia siria denunció las secuelas negativas de las medidas coercitivas unilaterales impuestas por Estados Unidos y sus aliados en el proceso de ofrecer ayuda humanitaria.
El impacto de estas sanciones recae principalmente en la gente común, denunció.
Por su parte, Grandi agradeció al gobierno de Damasco por su cooperación y resaltó la importancia de coordinar la acción humanitaria entre Acnur y las instituciones gubernamentales.
Siria enfrenta una situación catastrófica a consecuencia de los terremotos que la sacudieron tras 12 años de guerra y un asfixiante bloqueo impuesto por EEUU y sus aliados.
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