Con la proximidad de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Agua de 2023 —del 22 al 24 de marzo—, una nueva investigación de la consultora global de información GlobeScan destaca el impacto del aumento de la escasez de agua, que altera sociedades, economías, el medio ambiente y todos los aspectos de la vida.
Según los resultados de la Encuesta Radar, realizada de conjunto con Circle of Blue y el Fondo Mundial de la Naturaleza (WWF), el 58 por ciento de las personas a nivel mundial considera que la escasez de agua dulce es un problema “muy grave”, en tanto los latinoamericanos son los que más se preocupan por el acceso al vital líquido.
La fuerte preocupación por esta escasez ha aumentado en los últimos años, desde un 48 por ciento en 2014 al 61 por ciento en 2022, principalmente en 17 países, junto con la alerta por el cambio climático, citó en su sitio web WWF.
En el último año personas de Argentina, Corea del Sur, Vietnam, Colombia, Alemania y Perú reportan el incremento en la inquietud por esta situación.
La mayoría de los encuestados en Colombia, Italia, México, Perú y Türkiye dijeron que están siendo altamente afectados en su vida personal por tal problemática.
El 37 por ciento de quienes mencionaron haber sido personalmente afectados por el cambio climático, identificaron a las sequías como uno de los aspectos más impactantes.
“Estamos viendo una rara convergencia, cuando la opinión pública se alinea con realidades profundas a medida que el mundo enfrenta desafíos de agua cada vez mayores, que afectan la forma en que cultivamos nuestros alimentos, generamos energía y apoyamos una economía y un medio ambiente sostenibles”, señaló J. Carl Ganter, director gerente de Circle of Blue.
Añadió que esta encuesta de 30 mil personas muestra definitivamente que los ciudadanos de todo el mundo están sintiendo y hablando sobre los efectos del estrés hídrico y climático.
En vísperas de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Agua, remarcó, este es un barómetro crucial que revela una creciente demanda pública de acción por parte de los líderes políticos y corporativos.
Por su parte, Alexis Morgan, Líder de WWF Global Water Stewardship, afirmó “que el agua no viene de un grifo, viene de la naturaleza, pero con la pérdida de la naturaleza y el incremento de la inestabilidad climática, la escasez de agua solo empeorará, afectando a las sociedades y economías de todo el mundo”.
Sin embargo, subrayó, “a través de la colaboración, la restauración de humedales, la reconexión de ríos y la reposición de acuíferos, hemos probado formas de abordar estos desafíos compartidos del agua. Es hora de invertir urgentemente en estas soluciones», sentenció.
No sorprende que la gente esté cada vez más preocupada por la disponibilidad de agua dulce, las sequías del año pasado afectaron la vida de innumerables personas en todos los continentes y los indicadores sugieren que es probable que esto empeore, refirió Perrine Bouhana, director de GlobeScan.
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