El funcionario precisó que si el director general del OIEA, Rafael Grossi, visitó la central del Dniéper, durante su estancia en la ciudad de Zaporozhie, bajo control del régimen de Kiev, debería tomar en cuenta lo que esa planta representa para evitar el colapso de la mayor nuclear de Europa.
Según Rogov, Grossi debe conocer que la hidroeléctrica del Dniéper está minada desde hace más de un año, y si la misma es destruida, el nivel del agua en el embalse de Kajovka puede ser muy bajo y traería problemas con el sistema de refrigeración de la central nuclear de Zaporozhie.
Anteriormente, el funcionario informó que la central hidroeléctrica del Dniéper y cinco puentes que cruzan el río del mismo nombre en la ciudad de Zaporozhie fueron minados por Ucrania en marzo de 2022.
Se espera que el 29 de marzo el director general del OIEA realice una segunda visita a la central nuclear de Zaporozhie, y comprobará el nivel de seguridad de la central y señalará la necesidad de protegerla frente a las hostilidades.
La próxima visita también tiene por objeto mantener una rotación regular de expertos del OIEA en la central tras la situación en que ese proceso se retrasó allí casi un mes.
Tras la primera visita de Grossi a principios de septiembre de 2022, se estableció una presencia permanente de expertos del organismo en la central de Zaporozhie.
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