La entidad británica reclama dineros por derechos de formación del jugador, por considerar que Alonso llegó al Barcelona mediante traspaso, y no como agente libre.
De acuerdo con el reglamento de FIFA, existe un sistema de solidaridad por el cual un pequeño porcentaje de un traspaso debe ir a parar a los clubes formadores del futbolista desde que tiene 12 años.
Alonso creció en las canteras de Real Madrid, Adarve y posteriormente Bolton, donde permaneció hasta los 19 años.
Tanto Adarve como Bolton ya presentaron sendas demandas contra el Barcelona por el reclamo de esos derechos formativos.
El internacional español finalizó contrato con el Chelsea la temporada pasada y quedó libre, momento aprovechado por Barcelona para ficharlo a coste cero.
Sin embargo, los clubes litigantes aseguran que se trató de una operación de intercambio entre los clubes, pues el delantero gabonés Pierre-Emerick Aubameyang pasó de Barcelona a Chelsea por una cantidad muy inferior a su real valor de mercado (lo que sugeriría que Alonso entró en la operación como moneda de cambio).
La instancia encargada de dictar sentencia en este caso (y el del Adarve) será la Cámara de Resolución de Disputas de la FIFA.
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