El pronóstico preocupa a los habitantes de esa localidad, quienes desde el domingo en la noche enfrentan una tragedia luego del deslizamiento de tierra que sepultó varias viviendas y dejó un saldo de siete fallecidos hasta el momento.
Según expertos, la lluvia podría afectar las labores de búsqueda y rescate, así como incrementar la humedad del suelo, una de las causas del deslave.
Este martes, cientos de bomberos, militares y habitantes trabajan en esa localidad entre los escombros, en busca de nuevos sobrevivientes.
En la mañana, medios locales revelaron que un joven fue rescatado con vida, tras 24 horas del desastre natural.
El cuerpo de Bomberos de la ciudad de Guayaquil informó que utilizan cámaras de fibra óptica para verificar si hay atrapados entre los deshechos.
Según el director de la Secretaría de Gestión de Riesgos (SGR), Cristian Torres, al menos 100 personas fueron evacuadas del sector impactado por la posibilidad de que ocurran más deslizamientos en las próximas horas.
Torres reiteró que los trabajos de rescate no incluyen maquinaria pesada por el momento, sino liviana, para no remover la tierra y ocasionar nuevos derrumbes.
De acuerdo a la última actualización de la SGR, hay 23 personas heridas, 32 rescatadas, 64 desaparecidas, 500 afectadas y 22 damnificadas.
npg/nta