La asambleísta Paola Cabezas, del movimiento Revolución Ciudadana, considera que el Ejecutivo subestima a la ciudadanía y en un video divulgado a través de su cuenta de Twitter la legisladora expone los datos contradictorios que desde el oficialismo publican sobre el tema.
El viceministro de Gobierno, Mario Cuvi, sostuvo en una entrevista reciente al canal Teleamazonas que durante la gestión de Lasso ese indicador se ha reducido del 29 por ciento al 19 por ciento.
Sus declaraciones llamaron la atención, pues la meta era disminuir la desnutrición en seis puntos porcentuales hasta el 2025, cuando concluyera su mandato.
Para el expresidente Rafael Correa, afirmar que ha bajado 10 puntos en dos años, en un contexto de mayor pobreza, “es una muestra de ilimitada deshonestidad o ineptitud”.
Lo que sí parece ser cierto es que el Gobierno no cuenta con datos oficiales sobre la realidad del estado nutricional de los infantes ecuatorianos.
La última Encuesta Nacional de Salud y Nutrición data de 2018 y mostró que en ese momento el 27,2 por ciento de los niños menores de dos años padecían desnutrición crónica infantil.
Actualmente está en marcha otro estudio de ese tipo, cuya información preliminar arroja resultados positivos, según la vicetitular de la Secretaría Ecuador Crece Sin Desnutrición Crónica Infantil, María José Enríquez.
En declaraciones a medios locales, la funcionaria explicó que el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos publicará los números finales una vez que se terminen los ejercicios de validación de la investigación.
Por su parte, Mariana Tufiño, directora de la red Pacto Global Ecuador, de Naciones Unidas, subrayó que el país está en el segundo lugar de la región con el mayor porcentaje de menores en estado de desnutrición crónica.
De acuerdo con Tufiño, existen en esta nación andina problemas como la falta de agua potable y de condiciones para que los niños puedan tener un desarrollo integral.
El exdirector del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, Byron Villacís, resaltó en una entrevista a la emisora Radio Pichincha que la supuesta reducción de la desnutrición infantil, es otro síntoma de la informalidad con la que se maneja la estadística oficial.
El único objetivo, al parecer, es contentar al Gobierno, afirmó el experto, para quien si hubiese disminuido la desnutrición infantil, eso se reflejaría en la reducción de la inseguridad, pobreza, desigualdad y migración.
Sin embargo, apuntó, nada de eso ha ocurrido y también se refirió a lo incoherente de esa afirmación en medio de críticas por la baja ejecución presupuestaria y las pocas inversiones en sectores sociales.
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