El informe aclara que el último deceso por la enfermedad ocurrió el pasado día 11 y aclara que el saldo de víctimas fatales es provisional indicio de que el brote no está controlado y, peor, que se esperan nuevos fallecimientos.
La letalidad de la dolencia, similar a la mortífeera fiebre del Ébola, es palmaria cuenta habida que la decena de muertes ocurrió entre los 17 enfermos registrados, es decir más del 60 por ciento.
El Ministerio de Salud ecuatoguineao emitió un comunicado en el cual informó que mantiene bajo vigilancia en condición de sospechosos a 112 personas contactos de los pacientes confirmados.
El brote de la enfermedad comenzó en la provincia de Kié-Ntem (este), donde fue detectado el primer contagiado el 7 de enero y se extendió a Bata, la capital económica del país.
Gabón y Camerún, países con los cuales limita Guinea Ecuatorial, adoptaron desde temprano medidas de control sanitaria en previsión de la propagación de la dolencia.
mem/msl