«Seguiremos abogando por los medios legales. Ahora bien, como la diplomacia se rige por el principio de reciprocidad, la embajada polaca en Moscú tampoco puede acceder a sus fondos. Además, creemos posible responder con medidas asimétricas», dijo Zajárova, según destacó la agencia de noticias Sputnik.
A finales de febrero de 2022, tras el comienzo de operaciones bélicas a gran escala en Ucrania, una fiscalía distrital de Varsovia embargó las cuentas de las legaciones rusas alegando la sospecha de que sus fondos podrían usarse para «financiación del terrorismo».
Las protestas y apelaciones de Moscú al derecho internacional, particularmente a la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961, no surtieron efecto, así que la parte rusa congeló a su vez las cuentas de la embajada polaca.
El 3 de marzo de 2023, Varsovia transfirió el grueso de los fondos embargados a las cuentas de la fiscalía distrital, como «pruebas materiales».
«Aunque es pronto para hablar de una confiscación, seguimos sin poder usar este dinero», constató Zajárova.
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