Aunque no realizaron un llamado a movilizaciones en la nación sudamericana, los miembros de la Conaie anunciaron que estarán atentos ante las decisiones del gobierno de Guillermo Lasso y en defensa permanente de los intereses del pueblo ecuatoriano.
El presidente de esa organización indígena, Leónidas Iza, convocó a la Asamblea Nacional de la Conaie para sesionar en 24 horas y analizar la situación política de Ecuador.
Iza demandó también un pronunciamiento de manera inmediata por parte de la Corte Constitucional en garantía de los derechos del orden democrático.
Pese a que el decreto de muerte cruzada es un mecanismo establecido en la Constitución -señaló Iza- en este contexto no ha sido justificada su aplicación pues no demuestra la existencia de la causal de conmoción social y crisis política, denunció el líder indígena.
Este escenario no puede ser usado para violenta y criminalizar los derechos de los ecuatorianos -aclaró- mientras exigió a las Fuerzas Armadas y a la Policía Nacional el respeto a la Carta Magna y a los derechos humanos como señala la Constitución.
La clase trabajadora tenemos el derecho a la resistencia, reiteró.
En declaraciones a la prensa, Iza hizo referencia a la inseguridad y violencia que vive la nación andina, a los niveles de pobreza, al desempleo y al aumento de la migración durante los dos años de mandato de Lasso.
El gobierno y el modelo de la derecha neoliberal ha fracasado, y su principal figura, Guillermo Lasso, ha llevado al Ecuador a la peor crisis en la historia del país, aseveró.
La madrugada de este miércoles, el presidente ecuatoriano anunció la activación de la muerte cruzada, mecanismo previsto en la Constitución que le permite disolver la Asamblea Nacional y adelantar elecciones presidenciales y legislativas.
Mediante el decreto 741, el mandatario dio paso a la medida un día después del inicio en el Parlamento unicameral del juicio político en su contra por el delito de peculado.
Se espera en las próximas horas un pronunciamiento del Consejo Nacional Electoral sobre el cronograma que aplicarían para llamar a elecciones, que permitirían a Ecuador tener un nuevo presidente en noviembre próximo.
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