La diplomacia gala debe revisar sus enfoques y tomar en cuenta que la hegemonía y la violación de los derechos de los pueblos bajo falsos pretextos ya se acabaron de manera irreversible, afirmó la Cancillería por medio de un comunicado.
Aclaró que las pretensiones de París de recuperar los legados de la época colonial e imponer su dominio en el mundo son meras ilusiones en la actualidad.
Asimismo, tachó de histérica la actitud y las reacciones de Francia respecto a la presencia de Siria en la reciente Cumbre árabe celebrada en Arabia Saudita.
«Francia y sus herramientas radicales fracasaron en conseguir sus metas en Siria y ahora París se hace la ciega y no quiere reconocer los cambios que se produjeron en los escenarios regional árabe e internacional», denunció el texto de la declaración.
Aseguró que la política colonial ya no es válida en el mundo de hoy donde surgen nuevos valores basados en la multipolaridad.
En mayo del 2012 Francia cerró su embajada y cortó sus relaciones con esta nación levantina y tomó posturas muy críticas y hostiles hacia el gobierno sirio en los foros internacionales.
Damasco, a su vez, acusa a París de injerencia en sus asuntos internos y de apoyar a los grupos radicales que siguen desestabilizando el país.
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