Los asistentes al estadio Benito Villamarín de Sevilla le regalaron una cerrada ovación durante más de dos minutos del partido de cierre de la temporada, mientras Joaquín —como se le conoce incluso más allá del ámbito futbolístico— se despedía y entregaba entre lágrimas el brazalete de capitán al centrocampista Sergio Canales.
El ’17’ se abrazó con compañeros y rivales del Valencia, besó el césped del coliseo betico y devolvió los aplausos a los aficionados en sus últimos segundos sobre un terreno de juego en un partido oficial de LaLiga.
Este domingo concluyó el campeonato 2022-23, en fecha donde lo único en juego —FC Barcelona se coronó a falta de cuatro fechas— era la última plaza europea ganada por Osasuna —jugará la Conference League— y el restante equipo por descender, puesto lamentablemente ocupado por el Real Valladolid.
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