Al menos el presidente de la nación, Luis Lacalle Pou se comprometió en revisar en esta jornada los resultados de un reducido número de restricciones en ejercicio ejecutivo semanal para confirmarlas o suspenderlas.
Su más reciente paso fue la reapertura de gimnasios y comercios libres de impuestos en frontera con Brasil de donde volvieron caravanas de turistas de compras, y a cuyo movimiento se atribuyó la diseminación en el país de la agresiva cepa P1 del virus SARS CoV2, causante de la Covid-19.
Por lo pronto el Ministerio de Educación aplazó por siete días más el proyectado regreso presencial a las aulas en enseñanzas primaria y secundaria a causa del creciente número de contagios en población infantil escolar.
Uruguay registra una cifra sin precedente de 37 mil enfermos activos, un promedio de dos mil casos positivos diarios y más de cuatro mil fallecidos desde el comienzo de la pandemia en una población tres millones y medio de habitantes.
En febrero el Grupo Asesor Científico Honorario (GACH) recomendó una serie de medidas que fueron tomadas en forma parcial por parte del Gobierno y el coordinador, profesor Rafael Radi, pese a su recomendación de ‘blindar abril’ fue el peor mes y pronosticó que ‘las cifras, que son vidas de compatriotas, serán aún peores’.
Gremiales médicas y autorizados especialistas respaldaron el planteamiento del GACH de por lo menos 21 días de corte de actividades para un acople de la campaña de vacunación en curso, y la disminución de casos positivos, acompañado del necesario apoyo económico a población vulnerable en cuarentena.
Carolina Cosse, intendenta de Montevideo, escenario peor, declaró que es hora de revisar la estrategia frente a la pandemia y reiteró su propuesta de una mesa de trabajo nacional para llegar a acuerdos con participación de todos los actores políticos y de la sociedad ‘cámaras empresariales, sindicatos, universidades, científicos y la academia’.
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