Tokaev dio instrucciones a los jefes de todos los organismos, de que estén preparados para responder a las eventuales amenazas de crisis, según comunicó su oficina de prensa.
Durante la reunión el mandatario escuchó los informes del primer ministro, el fiscal general, el jefe del Comité de Seguridad Nacional y los titulares de Defensa, Exteriores e Interior, e insistió en garantizar la estabilidad económica y financiera, así como la seguridad de los conciudadanos.
Según el comunicado oficial, el mandatario definió a Rusia como socio estratégico de Kazajstán, expresó preocupación por los acontecimientos recientes y saludó el acuerdo para resolver la situación.
Más temprano, en una conversación telefónica con el presidente ruso, Tokaev apoyó las medidas tomadas para restablecer el orden constitucional, si bien calificó lo ocurrido como un asunto interno de Rusia.
Kazajstán y Rusia participan juntos en varias alianzas como la Unión Económica Eurasiática, la Comunidad de Estados Independientes, la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva y la Organización de Cooperación de Shanghái.
La frontera entre ambos Estados, otrora integrantes de la desaparecida Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, es la segunda más larga del mundo.
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