Por su parte, el ejército sudanés, no ha hecho ningún comentario oficial al respecto sobre este alto el fuego con motivo del Eid al Adha, uno de los ritos más importantes del calendario islámico.
En este sentido, el jefe de los paramilitares, General Mohamed Hamdan Dagalo, apodado «Hemedti», declaró un armisticio unilateral para los dos días del Arafah y el primer día del Eid al Adha, excepto en casos de defensa propia, añadió.
También se refirió a la creación de un comité para investigar posibles crímenes de soldados de las RSF contra civiles en la ciudad de Omdurmán, según la cadena Sky News Arabia.
Sin embargo, este anuncio de las RSF provocó un debate entre los sudaneses durante las últimas horas y el líder del Partido Umma, Mubarak al-Mahdi, lo consideró como un insulto a la mente de los ciudadanos.
En su cuenta de Twitter Al Mahdi dijo que primero las RSF deben salir de las casas y hospitales, luego deben devolver el oro y el dinero que robaron de esas casas, así como devolver vehículos y bienes de los comerciantes que saquearon, estimados en más de dos mil millones de dólares.
Además, recientemente Naciones Unidas también acusó a esos elementos paramilitares de llevar a cabo operaciones de liquidación en la ciudad de El Geneina, Darfur y calificó la situación allí como catástrofe humanitaria.
Los enfrentamientos en Sudán estallaron el pasado 15 de abril por contradicciones en medio de un proceso de integración de las Fuerzas de Apoyo Rápido, lideradas por Mohamed Hamdan Dagalo, vicepresidente del Consejo Soberano de Transición (CST), al seno de las Fuerzas Armadas, y el jefe del Ejército y presidente del CST, Abdelfatá al Burhan.
Ambos con grado de general, se disputan el control del país después del derrocamiento en 2019 del presidente Omar al Bashir.
mem/fvt