Según esta entidad, el Índice de Gerente de Compras, usado para medir el comportamiento de las operaciones manufactureras, subió a 49 puntos en junio, una leve mejora con respecto a las cifras del mes anterior, pero aún se mantuvo en el territorio de contracción.
El índice se mantuvo por debajo de la marca de 50 puntos que separa la contracción del crecimiento.
Tal indicador cerró mayo en 48,8 puntos y abril en 49,2 puntos, por lo que se trata del tercer mes consecutivo que registra una disminución.
Según la oficina, pese a la contracción, el nivel general de actividad manufacturera ha mostrado signos positivos y 12 de las 21 principales industrias del país han mejorado su desempeño.
Las autoridades de China aseguran que, si bien la economía necesita consolidar sus bases mientras se recupera de las afectaciones experimentadas durante el 2022, también confían en la estabilidad en las expectativas del mercado, la producción en áreas como la alta tecnología y bienes de consumo, y el sector no manufacturero.
De hecho, esta semana el primer ministro chino, Li Qiang, dijo que el gobierno confía en que este 2023 alcanzará la meta de crecimiento del Producto Interno Bruto del cinco por ciento, porque cuenta con potencial y espacio, si bien enfrenta varios desafíos en el desarrollo.
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