Las autoridades de Beijing confirmaron que un guía turístico del Palacio de Verano falleció este domingo por un golpe de calor, pese a recibir atención de emergencia.
La capital china es una de las regiones agobiadas en los últimos días por la subida histórica de las temperaturas, incluso debió emitir alertas rojas y llamar a la población evitar estar innecesariamente en exteriores.
Por otro lado, las lluvias torrenciales y sus estragos dejaron más de cinco mil 600 personas reubicadas, mil 795 casas destruidas, 80 carreteras dañadas y pérdidas económicas superiores a los 120 millones de yuanes (16,6 millones de dólares) en un condado rural de la provincia de Shaanxi.
Una situación similar reporta Hunan, con más de 109 mil damnificados y afectaciones materiales por 575 millones de yuanes (casi 79,5 millones de dólares).
En esos y otros lugares como municipalidad de Chongqing las precipitaciones intensas provocaron el desbordamiento de decenas de ríos, deslaves y otros desastres geológicos que impactan en la vida socioeconómica.
China está bajo el asedio del calor extremo en el norte y aguaceros en el centro-sur desde el mes pasado.
Este lunes las autoridades meteorológicas alertaron sobre la persistencia de las tormentas con sus consecuentes inundaciones y corrimientos de tierra en Shandong, Jiangsu, Sichuan, Guizhou y otras siete provincias.
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