De acuerdo con el IG, la mayor cantidad de ese polvo volcánico fue visible en los territorios de Rosal, Ticatilín, San Agustín del Callo y San Ramón, en la ciudad de Latacunga, al centro de la nación sudamericana.
La institución científica recomendó a los residentes en esas zonas de la sierra ecuatoriana, usar mascarilla N95 o un paño húmedo para cubrir nariz y boca, ropa con mangas largas y gafas para proteger los ojos.
Asimismo, sugirió el cierre de puertas y ventanas con toallas húmedas o cinta y nunca usar agua para limpiar la ceniza ya que puede convertirse en cemento y puede tapar las cañerías, provocando inundaciones.
Recientemente, la alteración de una capa de hielo en la cumbre del volcán Cotopaxi provocó lahares secundarios (flujo de lodo volcánico) generados desde la quebrada de Agualongo, en el Parque Nacional Cotopaxi, cercano a la ciudad de Latacunga.
Aunque el IG aclaró que de ninguna manera el evento correspondió con un aumento de la actividad volcánica, sino a un proceso de deshielo, la institución aseguró que se mantiene alerta.
Según los especialistas del IG, la más reciente actividad volcánica comenzó la noche del 21 de octubre de 2022, cuando registraron un tremor o terremoto causado por el movimiento del magma en el coloso, pero su reactivación inició en 2015, tras haber estado apagado 146 años.
Los expertos advirtieron que el mayor riesgo del Cotopaxi es que la lava ardiente derrita el glaciar, formando lahares violentos, y sus cálculos apuntan a que en media hora estarían en Latacunga y en una hora en Quito.
Unos 3,6 millones de personas en las provincias de Cotopaxi, Pichincha, Napo y Tungurahua podrían estar en riesgo ante una eventual erupción.
Sin embargo, unas 700 mil en el Valle de los Chillos, Latacunga, Mejía y Rumiñahui podrían ser las más afectadas, señaló el IG.
El Cotopaxi, segundo pico más alto del país con cinco mil 897 metros sobre el nivel del mar, es considerado uno de los volcanes más peligrosos del mundo debido a la frecuencia de sus erupciones, su estilo eruptivo y por la cantidad de poblaciones potencialmente expuestas a sus amenazas.
mem/nta