Con el objetivo de ocupar uno de los 137 curules en disputa, algunos hasta cambiaron de partido político para lograr postularse.
El movimiento Revolución Ciudadana (RC) inscribió a 45 de los 47 asambleístas que integraban el legislativo cuando el pasado 17 de mayo el presidente Guillermo Lasso disolvió el Parlamento con el decreto de muerte cruzada.
Todas las candidaturas de la RC están en firme y entre quienes pudieran volver se encuentran la exvicepresidenta primera de la Asamblea Marcela Holguín y Viviana Veloz, quien se destacó por impulsar el juicio político por peculado contra el jefe del Ejecutivo.
El Partido Social Cristiano (PSC) presentó entre sus candidatos a 11 exparlamentarios, mientras que Pachakutik solamente a una de sus anteriores legisladoras.
De esa última fuerza política dos representantes cambiaron al movimiento Construye a dos aspirantes que ya formaron parte del legislativo y fueron criticadas por su cercanía al oficialismo: Sofía Sánchez y Gisella Molina.
Por su parte, Luis Almeida, quien era del PSC y conocido por decir públicamente que su salario de más de tres mil dólares era insuficiente, ahora quiere regresar al hemiciclo legislativo por el movimiento Centro Democrático.
En los próximos comicios, además del presidente y vicepresidente, los ecuatorianos elegirán 15 asambleístas nacionales, 116 provinciales y seis en representación de las circunscripciones del exterior, es decir, de los migrantes.
El actual proceso electoral en esta nación sudamericana se anticipó luego de que Lasso aplicara la muerte cruzada en medio del juicio político que podía conllevar a su destitución.
Las autoridades electas deberán completar el actual mandato, es decir, solamente gobernarán o legislarán hasta 2025.
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