Bajo la coordinación del eurodiputado Manu Pineda, el auditorio “Marcelino Camacho” de Madrid sirvió de sede a los encuentros que perfilan la agenda de la cita en la capital belga, paralela a la Cumbre de la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
En la introducción al taller denominado “Bloqueos y Sanciones del imperialismo contra los pueblos”, Pineda comentó la importancia de renovar estrategias de solidaridad con países como Cuba y Venezuela, y con Palestina.
El eurodiputado de Izquierda Unida (IU) recalcó que ante la Presidencia española de la UE, unas elecciones generales en el horizonte cercano en el país ibérico y la persistencia de las medidas coercitivas de Estados Unidos, alzar la voz es absolutamente impostergable en favor de los latinoamericanos.
Admitió que en ocasiones le dicen que siempre da mucho protagonismo a Cuba en sus discursos y al respecto, Pineda destacó el papel de la isla caribeña como faro y ejemplo a lo largo de más de 60 años de Revolución para América Latina y el tercer mundo en general.
Araceli Escudero, por el Movimiento Estatal de Solidaridad con Cuba (MESC), apuntó que junto con la “incidencia enfermiza y obsesiva” de distintas administraciones estadounidense desde el triunfo de la Revolución, ahora la mayor de las Antillas enfrenta de nuevo la injusta inclusión en la lista de países que supuestamente colaboran con el terrorismo.
“Todo por ayudar a Colombia en las conversaciones de paz, una iniciativa que implantó Ronald Reagan en 1982, la quitó Obama (Barack) y la volvió a establecer Trump (Donald), quien además añadió 243 medidas para recrudecer aún más el bloqueo económico”, argumentó.
Escudero recordó que el cerco de Washington a la Isla, les costó a los cubanos más de un billón de dólares en pérdidas, además de sufrir las consecuencias de la pandemia y la subida de los precios en el mercado por la guerra en Ucrania.
Confirmó el anuncio antes de Manu Pineda que los días 16 y 17 de noviembre se desarrollará en Bruselas un Tribunal Internacional para denunciar el bloqueo contra Cuba, condenado por abrumadora mayoría en Naciones Unidas desde 1992.
Por su parte, Mónica Saiz, consejera de la Embajada de Venezuela en España, expresó su esperanza de que la Cumbre UE-Celac marque un nuevo punto de partida, en una relación hasta ahora desigual en la que el bloque comunitario aplica sanciones unilateralmente.
No son medidas inocuas, porque al final sirven de espaldarazo a las adoptadas por EEUU, que le cuestan a Venezuela 40 mil millones de dólares en pérdidas sólo por la factura petrolera, sin contar sanciones a aerolíneas, aviones, barcos y al oro para provocar un daño masivo a nuestra economía, puntualizó.
Durante la jornada, se analizaron también los problemas que afronta Palestina con la escalada de agresiones de Israel; los golpes de estado y el ascenso de la extrema derecha; deuda externa, comercio y multinacionales; recursos naturales, derechos humanos y migraciones; paz, justicia y solidaridad; feminismos, transición ecológica y pueblos originarios.
Pineda subrayó que tiene la esperanza de un encuentro respetuoso y constructivo entre la UE y la Celac, pero también expresó su temor de que algunos círculos del bloque comunitario europeo pretendan imponer sus recetas, alineados con Estados Unidos.
La Encargada de Negocios de la Embajada de Cuba en España, Indira Groero, asistió a las reuniones preparatorias de la Cumbre de los Pueblos.
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