En un comunicado, la organización precisó que la aceptación oficial por Washington se produjo la víspera, después de que el 30 de junio la Conferencia General de la Unesco aprobará el regreso, tras la decisión de abandonarla tomada por el entonces presidente Donald Trump en octubre del 2017.
La directora general Audrey Azoulay ratificó la oficialización del retorno a la membresía plena, un hecho que celebró.
“Es una excelente noticia para la Unesco, cuya dinámica, recuperada en los últimos años, seguirá creciendo. Nuestra acción se verá reforzada en todo el mundo”, manifestó.
El domingo, el secretario de Estado Antony Blinken llamó a Azoulay para informarle sobre la firma de la aceptación de la Constitución del ente del que Estados Unidos había salido hace seis años esgrimiendo una alegada postura antiisraelí, aunque ya desde el 2011 había suspendido su contribución financiera, generando una millonaria deuda.
La directora general afirmó que con el regreso del país norteño la organización “avanza una vez más hacia la universalidad” e insistió en que frente a los retos de nuestro siglo, urge una respuesta colectiva.
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