Los recientes refuerzos enviados por el Pentágono a la provincia nororiental siria de Deir Ezzor incluyeron un Himars que fue desplegado en la base establecida por Washington en el campo petrolero Al-Omar, difundió el portal Athr Press.
Anteriormente fueron enviados dos lanzamisiles del mismo tipo, el primero a la base en el campo gasífero de Konico, en Deir Ezzor, y el segundo en Tanef, en el este de Siria, cerca de la frontera con Iraq, donde los militares norteamericanos entrenaron a su milicia «Ejército Libre de Siria» a usarlos.
A principios de junio pasado, un portavoz del Comando Central de Estados Unidos confirmó que su país había decidido enviar misiles Himars a Siria. “Sí, hay Himars en Siria para proteger a nuestras fuerzas ante la existencia de riesgos de seguridad relacionados con la presencia estadounidense», comentó.
La víspera, fuentes fidedignas citadas por varios medios de prensa informaron que Estados Unidos envió dos mil 500 soldados a sus bases ilegales ubicadas en el norte de Iraq y nordeste de esta nación del Levante.
Las nuevas fuerzas serán desplegadas principalmente en los enclaves estadounidenses en el nordeste sirio y en la base de Tanef, ubicada en el este de la provincia de Homs, cerca de la frontera entre Siria e Iraq.
En paralelo, las tropas del Pentágono movilizaron a sus milicias mercenarias locales, en particular las llamadas Fuerzas Democráticas de Siria (FDS) y desplegaron gran número de ellas en las líneas de contacto con el ejército sirio en la provincia de Deir Ezzor.
Un representante de las tribus en la zona reveló que con estos movimientos, Washington pretende imponer su control y autoridad perdida en la zona, que está siendo testigo de un caos total.
El Pentágono tiene en Siria al menos una docena de bases, en su mayoría en los campos de petróleo y gas en la región nororiental de Al-Jazzira, principalmente en Hasakeh, mientras mantiene una en la zona de Tanef, en la frontera con Iraq, para impedir cualquier comunicación terrestre entre estos dos países.
Siria denunció en varias ocasiones que las fuerzas de Estados Unidos entrenan y forman a milicias separatistas y extremistas para seguir desestabilizando el país y prolongar la guerra en el mismo.
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