Así lo denunció Roberto Montoya Argüello, presidente del Colegio Médico, quien respondió a acusaciones contra galenos que fueron despedidos y apuntó que en ningún momento se vio afectada la atención de los pacientes, pero sí es dañada la posición gubernamental, y por eso tomaron otra acción más que fue destituirlos a ellos también.
El titular indicó que los médicos suspendidos ascienden a 47 y no hay ninguna causa para separarlos de sus trabajos, el único motivo es haber demostrado solidaridad con sus compañeras despedidas el 20 de mayo, debido a comentarios publicados en redes sobre la tragedia en el Estadio Cuscatlán,donde murieron al menos nueve personas.
Consideró que se toman las decisiones de sanción antes de tener el diagnóstico de lo sucedido, están en análisis datos por parte de las autoridades para definir si existió alguna falta a los deberes de las personas. Los internos sancionados no dejaron el turno, porque en un hospital quienes están a cargo de los pacientes son los médicos, no los internos.
“Por parte nuestra -señaló- no existe un trasfondo con carácter político-electoral, fue la parte gubernamental que tomó decisiones las cuales nos parecen lesivas hacia el gremio de Salud, que se siente afectado porque le están poniendo medidas injustas”.
Colatino indicó que a criterio de Montoya, las medidas con el gremio médico no son proporcionales a las que se toman con otros funcionarios, como, por ejemplo, las muertes dentro de los centros penales donde nadie del gobierno se pronuncia.
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