Con el título “A los 70 años del Moncada, al lado de Cuba y contra el bloqueo” Negro publicó en el sitio digital Noticias SIN (Servicios Informativos Nacionales) que el bloqueo de Estados Unidos es un genocidio, “porque procura una mortandad de muchas personas por cuestiones políticas».
En ese sentido, manifestó que los latinoamericanos y caribeños, amantes de la libertad, la independencia y autodeterminación de los pueblos, nos identificamos con la lucha que libran cubanas y cubanos, dignos continuadores de los ideales liberadores de José Martí, Antonio Maceo, Máximo Gómez y Fidel Castro.
En América Latina y el Caribe, y en particular para Cuba, dijo, el 26 de julio es señal de rebeldía contra la opresión, desobediencia al despotismo y resistencia contra la tiranía.
El tiempo y lugar en que ocurre un hecho, apuntó, pueden tener significación para un continente, un pueblo y una generación entera de mujeres y hombres.
Se refería así al asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes en Santiago de Cuba y Bayamo, respectivamente, por un grupo de jóvenes cubanos liderados por Fidel Castro, el 26 de julio de 1953.
Sería este hecho el inicio de la última y definitiva etapa por la independencia de Cuba, que no terminó hasta la derrota de la tiranía el 1 de enero de 1959.
El periodista señaló que esa acción fue fruto del pensamiento de Fidel Castro, a quien definió como “un líder de gran inteligencia y amplia actitud para crear; de chispa y de mucha genialidad para organizar y dirigir”.
Fidel, dijo, con su talento propio de un genio, interpretó de manera correcta la situación de Cuba al momento del 26 de julio de 1953, la cual él mismo reseñó ante la ONU, el 26 de septiembre de 1960.
Negro compartió con los lectores fragmentos de la descripción que hiciera en ese escenario el líder histórico de la Revolución sobre la situación en Cuba: “… Seiscientos mil cubanos con aptitudes para el trabajo no tenían empleos; tres millones de personas de una población total de algo más de seis millones no disfrutaban de luz eléctrica…”.
Rememoró que Fidel expresó en la ONU: “… tres millones 500 mil personas de un total de algo más de seis millones, vivían en cabañas, barracones y tugurios, sin las menores condiciones de habitabilidad”.
El también abogado dominicano sostuvo que por el hecho de Cuba tener, con respecto a Estados Unidos, una vinculación de típico corte colonial, cualquier cambio en provecho del pueblo de la isla afectaba a los intereses monopolistas norteamericanos.
En ese sentido, recordó que el 60 por ciento de las exportaciones cubanas iban hacia ese país, mientras del 75 al 80 por ciento de sus importaciones provenían de allí, lo que, acotó, prueba subordinación en el orden económico.
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