En su conferencia de prensa matutina en el Palacio Nacional respondió así a una pregunta tendenciosa de un periodista sobre si habría multiplicidad de laboratorios cuando se reinicie el período de vacunación para que la gente escoja libremente qué vacuna usar.
Recordó que es la misma política que se usó contra las vacunas rusas y chinas para favorecer a otras de laboratorios afines a ellos y al mismo tiempo denigrar y negar el avance científico de esos países. Ahora hacen lo mismo con las de Cuba, pero también chocan con sus buenos resultados que las clasifican entre las mejores del mundo.
No es cierto que la vacuna cubana sea mala, insistió el presidente, y no solamente hay ignorancia en los conservadores que la califican así, sino que hay mala intención, más de lo mismo y es el fondo de tu pregunta, le dijo al periodista quien no lo negó.
Hay tanta ignorancia en el conservadurismo, dijo de forma irónica, que llegaban a decir de los antígenos rusos y chinos que les iban a vacunar a la gente el virus del comunismo, pero ya nadie les cree y solo hacen el ridículo.
Dijo que el problema radica en que antes 10 grandes laboratorios ligados a los poderosos conservadores dominaban el 80 por ciento de las compras de medicamentos con una suma anual de más de 17 mil millones de dólares y ya eso se les acabó.
Ahora es el Estado el que hace las compras, pero para eso hubo que cambiar la constitución, recordó, y batallar contra la oposición que quería mantenerles esos privilegios a los empresarios abusadores.
Eso ha permitido, señaló, que el Estado se ahorre cada año miles de millones de dólares y puedan usarlos para incrementar la adquisición de fármacos y fabricarlos en el país, y que se repartan de forma gratuita en las redes hospitalarias de la salud pública, lo cual los molesta mucho.
Por su parte, el secretario de Salud Jorge Alcocer dijo que se ha avanzado mucho en el stock de medicamentos y que ya se está abordando un desabastecimiento en fármacos antidepresivos y siquiátricos, incluida algunos muy delicados como la morfina y el fentanilo que requieren de muchísimo control.
Al respecto López Obrador aclaró que no es tanto un problema de desabastecimiento en esos fármacos específicos como un tema politiquero de esos corruptos en estos momentos electorales.
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