Ambos partidos están sincronizados y mimetizados para el retroceso, escribió el PSOE en su cuenta de Twitter al subrayar que entre otras cosas incluyen sacar la ideología de las aulas, poner a la familia en el centro de las políticas públicas y derogar la ley de memoria democrática de la Comunidad.
La portavoz del PSOE, Pilar Alegría, afirmó que Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, “ha elegido camino, ha unido para siempre su destino a la ultraderecha”.
Por su lado, representantes de las Juventudes Socialistas, encabezadas por su secretario general en España, Víctor Camino, visitaron este viernes a la tapia del cementerio de la Almudena para homenajear a las Trece Rosas, las jóvenes fusiladas por la dictadura de Franciasco Franco el 5 de agosto de 1939 tras ser acusadas de rebelión.
Luego de depositar un ramo de 13 rosas en el lugar en el que fueron asesinadas, deploró que el rechazo de gobiernos de comunidades autónomas de hablar de memoria democrática, supone un peligro para su legado.
En tal sentido, Juventudes Socialistas rindió tributo a las Trece Rosas en el 84 aniversario de su fusilamiento, para reivindicar su compromiso con la ‘libertad, igualdad y democracia’.
La ultraderecha quiere borrar de la historia el nombre de personas que se jugaron la vida por el progreso, enfatizaron.
Según el acuerdo entre el PP y Vox para gobernar en coalición Aragón, la organización ultraderechista dirigirá dos consejerías, Desarrollo Territorial, Despoblación y Justicia, que tiene rango de Vicepresidencia primera, y la de Agricultura y Ganadería.
Mientras tanto, siguió la andanada de críticas de la derecha a las vacaciones del jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, en Marruecos, con presión para que el PSOE permita un futuro gobierno del PP por obtener mayores escaños en las elecciones generales del pasado 23 de julio.
Sin embargo, el PP, con 137 escaños, no alcanzó la mayoría absoluta requerida (176), ni tampoco lo conseguiría con su socio de Vox, que conquistó 33.
Todo queda pendiente a la fecha del 17 de agosto, cuando se instalarán las nuevas Cortes Generales (Parlamento), a partir de lo cual, el rey Felipe VI, en calidad de jefe de Estado, podrá llamar a todos los grupos para decidir una propuesta de investidura.
Se sometería entonces a debate en el Congreso de Diputados y de no avanzar en una votación que requiere de mayoría absoluta, pudiera repetirse o que el monarca acuda a otra alternativa.
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