Durante una reunión sostenida en la sede del Ejecutivo sirio, las dos partes abordaron las vías para fortalecer la cooperación en diversos campos, en particular en lo económico y energético, y subrayaron la necesidad de redoblar los esfuerzos para elevarla al más alto nivel.
También trataron el tema de las acciones prácticas tomadas para implementar los acuerdos alcanzados durante la reciente visita del mandatario persa a Siria, además del rol de los dos países y sus esfuerzos para lograr la estabilidad en la región.
El jefe de Gobierno consideró que Damasco y Teherán enfrentan los mismos desafíos, sea el terrorismo o el injusto bloqueo, e instó a elevar los niveles de coordinación y acción conjunta para enfrentar las medidas coercitivas unilaterales impuestas a los dos pueblos.
Siria sufre del saqueo de sus riquezas nacionales y del pleno apoyo de Estados Unidos y Occidente al terrorismo y las milicias separatistas, pero lo anterior no hará que Siria cambie sus posturas nacionales de apego a sus derechos y su decisión nacional independiente.
Por su parte, Jalalzadeh expresó su gratitud a Siria por sus posturas en apoyo al país persa y sus causas justas, y ratificó que Teherán mantendrá su respaldo encaminado a aliviar la difícil situación que vive el pueblo sirio como consecuencia del injusto asedio.
El alto funcionario persa señaló que el pueblo sirio, que ha derrotado el terrorismo, es capaz de vencer en la batalla económica que libran sus enemigos.
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