La secretaria de prensa de la mansión ejecutiva, Karine Jean-Pierre, confirmó en un comunicado que el mandatario visitará ese estado de la Unión en compañía de su esposa Jill Biden “para ver de primera mano” los impactos del siniestro.
De acuerdo con cifras actualizadas, el peor incendio forestal en la historia de Estados Unidos en más de un siglo dejó un centenar de muertos, pero no es un número conclusivo, porque podría aumentar, según funcionarios locales.
Las casas y los negocios en toda la isla fueron destruidos, y testigos describieron escenas aterradoras de personas lanzarse al océano Pacífico para tratar de escapar de las llamas, reseñan medios de prensa.
“El presidente continúa organizando una respuesta de todo el Gobierno a los incendios mortales de Maui, y se ha comprometido a brindar todo lo que la gente de Hawái necesita del gobierno federal mientras se recuperan de este desastre”, subrayó Jean-Pierre.
Biden habló el jueves pasado sobre la devastación en Maui, pero el ocupante del Despacho Oval, quien buscará la reelección en las presidenciales de noviembre de 2024, ha enfrentado críticas por expresar como respuesta un «sin comentarios» cuando el domingo último se le preguntó sobre el aumento del número de muertos en Maui.
De hecho, la mansión ejecutiva intentó mejorar la imagen del gobernante al rechazar críticas acerca de las vacaciones de Biden en momentos de crisis en Hawái.
Reportes de prensa remarcaron que mientras Maui contaba los muertos el domingo, el presidente Biden se sentó en una playa de Delaware, montó en bicicleta y aportó poco sobre el incendio forestal.
El archipiélago de Hawái está formado por nueve islas y atolones, además de islotes, arrecifes y bancos de arena, en una alineación del noroeste al sureste a lo largo de dos mil 450 kilómetros en el Pacífico norte.
La formación toma el nombre de la isla más grande, Hawái, que a la vez es la más oriental, y la segunda en tamaño es Maui.
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