Reunidos en Asamblea Nacional desde la víspera, los docentes están estudiando en comisiones las propuestas a los ocho puntos planteados al Gobierno, entre ellos la denominada deuda histórica, surgida cuando bajo la dictadura militar se le redujeron los salarios a este sector.
Esa medida dictada por el régimen de Augusto Pinochet (1973-1990), además de disminuir sus ingresos impactó en el monto de las pensiones de quienes decidieron acogerse a la jubilación y exigen que la diferencia sea compensada, como prometió el presidente Gabriel Boric.
La misiva, firmada por el nuevo titular de la cartera, Nicolás Cataldo, ofrece el pago a los casos más urgentes, aproximadamente una cuarta parte del total, el cual comenzaría progresivamente a partir de 2024.
El resto de la compensación se discutirá en una mesa de negociaciones entre el Ejecutivo y representantes del Colegio de Profesores de Chile.
Acerca de la retribución atrasada de los bonos de incentivo laboral, el Gobierno se comprometió a completar en septiembre los correspondientes a 2018, en octubre les tocaría a los de 2019 y luego se analizarán los casos con documentación completa de 2020.
Respecto al tema de la violencia dentro de los recintos escolares, la propuesta es iniciar una campaña comunicacional a partir del año próximo por medio de los programas Habilidades para la Vida y A Convivir se Aprende.
El dirigente magisterial de la Región Metropolitana, Mario Aguilar, dijo que la carta del ministerio es más de lo mismo respecto a respuestas anteriores.
“No me parece que sea un avance relevante sobre lo planteado por el profesorado”, manifestó el líder gremial.
El presidente nacional de la organización de docentes, Carlos Díaz, señaló que la carta está en manos de las filiales del país, donde se decidirá la conducta a seguir.
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