Según manifestó en rueda de prensa el reconocido meteorólogo, para el planeta, en esos dos meses las temperaturas registradas alcanzaron niveles que nunca antes se habían registrado ocurrido durante el período de observaciones instrumentales.
Así, Europa registró nuevos máximos de temperatura para varias fechas, precisó el científico. El récord nacional de temperatura también se estableció en Marruecos, donde el calor alcanzó los 50,4 grados.
En Türkiye, se batió el récord de la temperatura más alta, con el termómetro marcando más de 49,5 grados. En muchos otros países de Oriente Medio, la temperatura superó los 50 grados centígrados.
Al mismo tiempo, los indicadores meteorológicos en la parte europea de Rusia fueron moderados, «incluso algo por debajo de lo normal», añadió Vílfand. Por otro lado, en el resto del país, en los Urales y en Siberia, se vivieron temperaturas muy altas.
«En el Ártico, este julio fue el tercero más cálido en la historia de las observaciones meteorológicas», concluyó el científico ruso.
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