En la adopción final de un documento de 46 puntos, aprobado en la última sección de la Cumbre del Grupo, con sede en el Palacio de Convenciones de La Habana, sus integrantes subrayaron que tales acciones no sólo socavan los principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas y el derecho internacional.
Constituyen un serio obstáculo para el avance de la ciencia, la tecnología y la innovación y la plena consecución del desarrollo económico y social, en particular en los países en desarrollo, remarcaron en el texto.
Por otro lado, el G77 insistió en que las medidas coercitivas unilaterales tienen repercusiones negativas y devastadoras en el disfrute de los derechos humanos, incluidos el derecho al desarrollo y a la alimentación.
Dichas acciones también obstaculizan el acceso de los países afectados a la asistencia sanitaria, la ayuda y suministros humanitarios y los bienes de propiedad de la nación, señalaron.
En otro punto adoptado, los miembros del G77 y China, cuya presidencia pro témpore asumió Cuba en enero del pasado año, repudiaron los monopolios tecnológicos y otras prácticas desleales que, afirmaron, obstaculizan el avance tecnológico de los países en desarrollo.
Al respecto, concidieron en que los Estados que tienen el monopolio y el dominio en el ámbito de las tecnologías de la información y la Ccomunicación, incluido internet, no deben utilizar los avances en estas áreas como herramientas de contención y supresión del legítimo desarrollo económico y tecnológico de otros Estados.
«Hacemos un llamamiento a la comunidad internacional para que fomente un entorno abierto, justo, inclusivo y no discriminatorio para el desarrollo científico y tecnológico», remarcaron.
Asimismo, alertaron sobre la preocupación que, a mitad de camino de la implementación de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, el mundo, en particular los países en desarrollo, siguen estando muy lejos de alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Los países del G77 y China consideraron que la ciencia, la tecnología y la innovación se han identificado como motores de transformación para acelerar el progreso en el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y que su despliegue estratégico podría resolver y minimizar las diferencias entre los Objetivos y las metas.
Para ello, significaron que la transferencia de tecnología a los países en desarrollo será fundamental para intensificar y acelerar la aplicación de la Agenda 2030.
lam/may