“El nuevo dron sofisticado participó en operaciones de guerra electrónica y de interferencia de radares aéreos”, anunció el general Alireza Sheij, portavoz de esos ejercicios.
Los simulacros de guerra en curso incluyen un mensaje de “paz y amistad” para los países de la zona, a los cuales les fue cursada por las autoridades iraníes un llamado a la unidad y la acción conjunta para garantizar la seguridad regional sin la presencia de fuerzas foráneas.
La etapa principal de estos ejercicios preparatorios con aviones militares no tripulados comenzó la víspera y en ella participan tropas de las cuatro unidades del Ejército, con alrededor de 200 drones de diferentes tipos desplegados por gran parte del territorio nacional.
El escenario abarca desde las cálidas aguas del golfo Pérsico y el mar de Omán en el sur, hasta las zonas del este, oeste, norte y centro del país.
Las primeras incursiones se enfocaron en revisar el uso correcto y eficiente de las unidades de guerra electrónica, con la práctica de una variedad de tácticas.
El objetivo de estas actividades reside en evaluar la precisión de los aparatos, las habilidades de los pilotos y la potencia de los disparos, según comentó el contraalmirante Habibolá Sayari, comandante adjunto del Ejército de Irán para Asuntos de Coordinación.
En este ejercicio se utilizan drones de reconocimiento, de combate, kamikazes y con capacidad de transportar misiles, bombas y equipos de guerra electrónica, reveló Sayari.
El Ejército de Irán realizó el primer ejercicio conjunto con drones a gran escala en agosto de 2022, durante dos días, con más de 150 ejemplares de fabricación nacional.
En nuestros días, el país de los persas se ubica entre las cinco naciones a nivel global con capacidad para fabricar drones de gran calidad y precisión, con solicitudes de compra que llegan desde varios países occidentales y europeos.
oda/ynr