“La compañía de generación de electricidad está amenazada con cerrar en cuestión de horas debido a la falta de combustible, lo que amenaza con hundir a la Franja en una completa oscuridad”, que afectará todos los servicios básicos, alertó un comunicado de las autoridades que controlan ese territorio.
Ante esta realidad que amenaza la vida de más de 2,3 millones de personas, lanzamos un llamado de socorro urgente a la comunidad internacional y sus organizaciones humanitarias, señaló el texto, citado por el portal noticioso Al Quds.
El ministro israelí de Energía, Israel Katz, anunció el lunes el corte de los servicios de agua a la Franja de Gaza, un día después de finalizar los suministros de electricidad y combustible como parte de un “bloqueo total”.
Katz indicó que ordenó a la empresa Mekorot cortar inmediatamente el suministro del líquido, del que depende gran parte de los dos millones de palestinos que viven en el enclave costero.
Poco antes, el titular de Defensa, Yoav Gallant, decretó un bloqueo total contra ese territorio, bajo intensos bombardeos de la aviación desde el sábado último, tras una ofensiva del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) contra Israel, donde murieron más de mil 200 personas.
“He ordenado un asedio completo a la Franja de Gaza. No habrá electricidad, ni comida, ni combustible, todo está cerrado. Estamos luchando contra animales y actuaremos en consecuencia”, subrayó Gallant.
La Cancillería palestina denunció ayer esas medidas, que consideró un crimen de guerra.
El Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados afirmó en un comunicado que la decisión del gabinete de Benjamin Netanyahu es “una flagrante violación de las normas internacionales y del derecho humanitario, los Convenios de Ginebra y las obligaciones del Estado ocupante”.
El texto llamó al Consejo de Seguridad de la ONU, al secretario general del organismo y a la comunidad internacional a asumir sus responsabilidades para detener de inmediato la agresión contra el enclave costero.
Asimismo, exigió el levantamiento de las medidas de castigo colectivo y que se garanticen las necesidades básicas en los territorios ocupados.
oda/rob
















