El líder ruso recordó, en su intervención en la reunión que se desarrolla en Bishkek, la capital kirguisa, que en la agenda del diálogo está la preparación de un tratado de paz entre Armenia y Azerbaiyán para ponerle punto final a ese viejo conflicto que data desde la desaparición de la URSS.
“Rusia, por supuesto, está dispuesta a brindar toda la asistencia necesaria a nuestros socios: en concreto, aceptamos organizar las negociaciones en Moscú si es necesario, en cualquier formato», dijo Putin.
Antes se pueden entablar conversaciones entre los ministros de Exteriores de los dos Estados, prosiguió el mandatario ruso, quien aseveró que su país «contribuirá a que estas negociaciones terminen con un acuerdo de paz».
Armenia y Azerbaiyán libraron dos guerras por Nagorni Karabaj desde que ese territorio, de población mayoritariamente armenia, decidió separarse en 1988 de la entonces República Socialista Soviética de Azerbaiyán.
El 19 de septiembre, Azerbaiyán lanzó «una operación antiterrorista» que derivó en el desarme y la autodisolución de las milicias karabajíes y, finalmente, en el anuncio de la autoproclamada república de Nagorni Karabaj que dejaría de existir desde el 1 de enero de 2024.
Más de 100 mil armenios étnicos, la práctica totalidad de la población del enclave separatista, huyeron a Armenia a finales de septiembre.
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