Según la funcionaria, se supo de una nueva acción violenta contra el monumento a los compañeros de Suvórov (1730-1800), que murieron al cruzar los Alpes en 1799, en la garganta Schollenen.
«Estamos profundamente indignados por este acto de vandalismo. La Embajada de Rusia en Berna protestó enérgicamente ante el Departamento Federal de Asuntos Exteriores suizo, exigiendo que se tomaran las medidas necesarias para identificar y castigar a los responsables», dijo Zajárova.
Asimismo, la portavoz subrayó que el monumento en forma de cruz cristiana en el desfiladero de Schollenen fue erigido en memoria de los soldados caídos del ejército ruso bajo el mando de Suvórov, que contribuyeron significativamente a la liberación de la Confederación de las tropas napoleónicas.
«Esto ha sido y sigue siendo una parte inherente de nuestra historia común. Una vez más, instamos a las autoridades suizas a que garanticen una protección adecuada del monumento», concluyó.
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