El jefe político del Movimiento de la Resistencia Islámica (Hamas), Ismail Haniye, destacó en una alocución televisada que esa masacre supondrá un punto de inflexión en el enfrentamiento de su organización contra Israel, a la vez que exhortó a árabes y musulmanes a unirse en sus protestas contra tales crímenes.
Tras el ataque al hospital El Ahli, Haniye aseguró que golpearán el enemigo en todos los frentes, lo que observadores identifican como un reforzamiento de la disposición de Hamas a proseguir la lucha armada contra la ocupación, pese al costo de la contienda, que ya suma más de dos mil palestinos muertos.
Israel realiza desde hace 10 días bombardeos contra la Franja de Gaza, a la vez que amenaza con lanzar una operación terrestre de gran envergadura contra su rival, ante tal actitud países árabes condenaron lo que calificaron de castigo colectivo contra la población de la Franja de Gaza.
Asimismo, una de las primeras evidencias del estancamiento en que se halla el conflicto israelí-palestino en general, ahora enfocado en los sucesos de la Franja de Gaza, es la posposición de una reunión de los presidentes Joseph Biden, de Estados Unidos, Mahmud Abas, de Palestina y Adelfatah al Sissi, de Egipto.
Esa cumbre estaba prevista para sesionar en Amman, la capital jordana, donde el rey Abdalá II, auspiciaría como anfitrión de un intercambio que debía centrarse en los acontecimientos más recientes en el Medio Oriente.
Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Yemen condenó el artero bombardeo perpetrado por las fuerza aérea israelí contra el hospital El Ahli de la palestina Gaza, que mató a cientos de civiles y precisó que ese ataque de Tel Aviv a la clínica comunitaria Bautista deviene genocidio y crimen contra la humanidad.
La Cancillería yemenita afirmó que los autores deben recibir castigo y solicitó a la comunidad internacional, asumir sus responsabilidades morales, «ejerciendo presión sobre el Estado de ocupación israelí para un alto al fuego inmediato».
También este martes ciudadanos en Líbano, Túnez, Jordania, Argelia y Siria salieron a las calles en solidaridad con Palestina y para denunciar al régimen sionista y su estrategia genocida.
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