En la segunda semana de la operación Diluvio de Al-Aqsa, la Resistencia libanesa (Hizbulah) apuntó a los sitios israelíes Al-Ramtha, Zibdin, Al-Radar, Ruwaisat Al-Qarn y Ruwaisat Al-Alam en las granjas de Shebaa y las colinas de Kfar Shuba, en la frontera sur.
Al mismo tiempo, sus combatientes llevaron a cabo una operación de respuesta contra la posición enemiga de Dahr al-Assi, frente a Mays al-Jabal; mientras, los proyectiles israelíes apuntaron a los afueras de la localidad.
Según el canal panárabe Al Mayadeen, las operaciones de Hizbulah en Líbano, que comenzaron el 8 de octubre, provocaron pérdidas sin precedentes para Tel Aviv en su frente norte desde la guerra de julio de 2006.
Los misiles antiblindados guiados de la Resistencia destruyeron 10 tanques Merkava de tercera y cuarta generación y cuatro vehículos diferentes de transporte, reflejaron los medios israelíes.
Por otra parte, indicaron que hasta 40 soldados de diferentes unidades y rangos resultaron muertos o heridos, y unos 140 colonos fueron hospitalizados.
Al respecto, el corresponsal del canal local Al Manar Ali Shoeib precisó que alrededor de 50 mil personas abandonaron sus hogares de 26 asentamientos fronterizos israelíes con territorio libanés.
En este sentido, la prensa israelí describió la escalada militar en la frontera con Líbano como una «guerra real”, al señalar que Hizbulah no sólo disuade a Tel Aviv en el norte, también lo hace a la hora de actuar en Gaza.
Desde Iraq, la Resistencia atacó ayer la base estadounidense de Harir, en el norte del país, a 45 kilómetros del aeropuerto internacional de Erbil.
Antes, la milicia iraquí reinvindicó el lanzamiento de misiles contra las fuerzas norteamericanas en Ain al-Assad, en el oeste de la nación.
En este contexto, los combatientes iraquíes prometieron no quedarse impasibles ante el genocidio israelí contra los palestinos en Gaza.
Por su parte, la cadena CNN reflejó que el buque de guerra estadounidense USS Carney interceptó cuatro misiles de crucero y 15 drones lanzados por el movimiento yemenita Ansar Allah.
La propia publicación reconoció que el continuo bombardeo de drones y misiles dirigidos hacia Israel desde lejos constituye una de las señales preocupantes de la posibilidad de extenderse el conflicto más allá de las fronteras de la Franja de Gaza.
El 7 de octubre, la operación sorpresa del movimiento Hamas recibió el respaldo del resto de las fuerzas palestinas y del llamado eje de la resistencia en la región, en una respuesta a más de siete décadas de desplazamiento, ocupación, colonialismo, masacres y violaciones israelíes.
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