Después de recibirlo en Ramala, en la ocupada Cisjordania, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina también señaló al visitante la urgencia de una protección internacional inmediata para un pueblo sometido en los últimos días a bombardeos indiscriminados y a un bloqueo total en la Franja de Gaza, en represalia de Israel por el ataque de Hamas el 7 de octubre.
Abbas denunció que solo en las últimas 24 horas fueron asesinados 800 palestinos.
Nuestro pueblo es víctima de un ataque salvaje de la máquina de guerra israelí, y nosotros exigimos un alto el fuego, afirmó el dirigente a Macron, quien antes se reunió con su par de Israel, Isaac Herzog, en Tel Aviv y con el primer ministro Benjamin Netanyahu en Jerusalén.
El líder palestino reclamó la apertura permanente de corredores humanitarios para permitir la entrada de alimentos, medicinas y combustibles, así como el restablecimiento de los servicios de agua en Gaza, uno de los territorios más densamente poblados del mundo, donde se reportan más de cinco mil víctimas fatales por los bombardeos.
Abbas insistió igualmente a Macron en la condena a las acciones de Israel que obligan a los palestinos a dejar sus hogares.
El presidente de Francia manifestó antes en una rueda de prensa conjunta con Netanyahu la importancia del reconocimiento al derecho legítimo de Palestina a ser un Estado, conviviendo en paz y seguridad con su vecino.
La seguridad de Israel no podrá ser duradera sin el relanzamiento decisivo de un proceso político con los palestinos, expuso.
Sin embargo, Macron no abogó por un cese de las hostilidades, y sí por una coalición internacional para luchar contra Hamas, mencionando la creada para combatir al Estado Islámico.
Por su parte, Netanyahu ratificó su intención de destruir a Hamas, alegando que se trata de una guerra “entre la civilización y la barbarie”.
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