La víspera la ministra congoleña de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, Arlette Soudan-Nonault, dio la bienvenida a los participantes, entre los que se encuentran líderes de 37 países, representantes del sector privado, de organizaciones internacionales y de la sociedad civil.
Soudan-Nonault exhortó a una colaboración fructífera entre las tres cuencas, que según señaló son guardianas de la biodiversidad mundial, están consideradas como los pulmones del planeta y constituyen importantes reguladores del clima.
Debemos reflexionar sobre la manera en la que nos organizamos y podemos hacerlo mejor, si nos estructuramos y buscamos resultados de forma colectiva, subrayó la ministra.
Hoy estamos de cara a nuestras propias responsabilidades, añadió, y comentó que la cumbre brinda una oportunidad para acelerar la capacidad de financiamiento y establecer mecanismos de cooperación que permitan avanzar en los propósitos trazados.
Durante la jornada también intervino la secretaria general de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA), Alexandra Moreira, quien mediante un video apuntó los retos en común que tienen los países que comprenden estas tres grandes cuencas tropicales.
Mencionó entre ellos las poblaciones que habitan en esos territorios, de ahí que refiriera que los desafíos no son solo medioambientales, sino económicos y sociales.
Moreira expuso la experiencia de trabajo de la organización integrada por Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela; la cual en dos décadas de labor ha tratado de generar cooperación y trabaja enfocada en ayudar a las políticas públicas de esos países con una visión regional.
Significó la labor realizada en la búsqueda de consensos para avanzar con una visión y gestión común del ecosistema, de forma integral y con medidas oportunas a nivel multisectorial.
Dentro de esta, precisó, un punto de atención importante son las zonas fronterizas, ya sea en el manejo hídrico o el control de los incendios forestales.
La secretaria general de la OCTA remarcó la relevancia de la cita en el Congo, que permitirá un mayor intercambio de información y experiencias, así como una posible concertación de acciones.
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