A 20 días del inicio de la Operación Diluvio de Al-Aqsa, el dirigente pidió abrir todos los cruces, en especial el de Rafah, al subrayar la necesidad de llevar todo lo posible a la población de Gaza para restablecer el ciclo de vida en el enclave costero.
El líder político convocó a los presidentes, líderes y dirigentes de opinión a afirmar, clara y francamente, la legitimidad de la resistencia en la tierra de Palestina.
De acuerdo con Haniyeh, el terrorismo es el que sostiene a este ocupante y guarda silencio sobre las masacres israelíes contra el pueblo palestino.
Al mismo tiempo, acentuó: «hay que ganar la batalla de la conciencia, de las voluntades y de la descripción precisa de lo que está sucediendo».
Haniyeh saludó las voces y las posturas valientes y audaces que declararon el derecho a la resistencia legítima; y en ese sentido, reafirmó su llamamiento a permanecer en levantamiento popular después de 20 días de heroísmo.
Bajo el título «Abran el cruce de Rafah… Detengan la guerra genocida», los movimientos de resistencia palestinos convocaron a las naciones islámicas y árabes y a los pueblos libres del mundo a realizar jornadas de solidaridad en plazas, ciudades y capitales con el objetivo de denunciar los crímenes de la ocupación israelí.
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