La destrucción de lo público para privatizar es vieja, advirtió en sus redes sociales el exvicecanciller ecuatoriano Kintto Lucas, quien recordó cómo en la década de los 90 del siglo pasado el país vivió una situación similar.
Afirmó que los gobiernos neoliberales desde hace décadas destruyen empresas y servicios públicos para regalarlos a ciertos empresarios.
También la excandidata presidencial por la Revolución Ciudadana, Luisa González, se pronunció en ese sentido al señalar que “la hoja de ruta siempre fue crearnos el problema para vendernos SU solución privatizadora”.
El ministro de Energía y Minas, Fernando Santos, justificó la falta de inversiones en el sector energético al mencionar la víspera que “el Gobierno quiso modernizar y dar espacio para la iniciativa privada, pero no contó con la mayoría en la Asamblea Nacional».
Por su parte, el presidente Guillermo Lasso justificó hoy los apagones al responsabilizar a la ciudadanía por el aumento del consumo en medio de la mayor sequía en 50 años y alegó que la situación también se debe a la inacción de administraciones anteriores.
Sin embargo, la ciudadanía lo responsabiliza por el racionamiento eléctrico que, además de causar incomodidad, provocará pérdidas millonarias para la economía, según representantes de empresas y pequeños negocios.
Prensa Latina escuchó a varios comerciantes que se quejaban no sólo de estar en la oscuridad, sino de la falta de previsión del Ejecutivo.
Los grandes negocios tienen generadores y mantienen el servicio, pero nosotros podemos hasta perder la mercancía, dijo Marcos Rufino, quien en su pequeño comercio en Quito vende productos refrigerados, como helados, quesos y yogures.
El vendedor Bryan Muñoz dijo que el dueño de la cafetería donde trabaja prevé comprar una planta, pero eso desencadenará el aumento del precio de los productos y perjudicará al consumidor.
Para los ecuatorianos, los apagones son un retroceso de más de una década, cuando por falta de generación también hubo racionamiento eléctrico.
Sin embargo, ese problema fue superado cuando el gobierno del presidente Rafael Correa (2007-2017) duplicó la capacidad de generación, pero la falta de nuevas inversiones y mantenimientos conllevaron a la actual situación, según apuntan expertos.
El exministro de Electricidad y Energías Renovables, Miguel Calahorrano, señaló en entrevista con Radio Pichincha que desde hace más de un año se sabía la posibilidad de estiaje y Lasso no hizo nada al respecto.
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